Las posturas de #yoga (también conocidas como #asana) son en realidad sólo 1 de los 8 elementos que componen el #yoga. Y a medida que profundizamos en los textos antiguos y sagrados del yoga, nos damos cuenta de que ni una sola vez mencionan cómo deberían ser las posturas.

Cualquiera que me conozca sabe que enseño alineación. Entiendo la importancia de la anatomía, fisiología y biomecánica del cuerpo. Sin embargo, también reconozco que cada cuerpo es estructuralmente diferente.

Desafortunadamente, rara vez se nos muestra la singularidad de los cuerpos de las personas, sino la proliferación de poses “perfectas” de practicantes genéticamente dotados. Aunque, en última instancia, no existe una alineación única para todos ni una pose única para todos.

Esto me lleva al segundo punto.

Apoyos y modificaciones. Estos accesorios son la clave para encontrar la “comodidad en la incomodidad” de las posturas de yoga. La noción de que usar accesorios o modificaciones es hacer trampa, daña nuestras percepciones. Así que la próxima vez que te ofrezcan un accesorio de yoga, acéptalo.

Por último, el problema del ego.

Fui formada como bailarina, tuve algunas bases de gimnasia, e incluso así, cada pose que hago viene con mucho trabajo y disciplina. Y a veces, mis posturas de yoga no se parecen a las de mis profesores: cadera cerrada y en twist, hombros desalineados, cuello lesionado…

Entonces, ¿qué puede hacer un yogui?

¿Mi consejo? Ven a tu tapete/mat, mantente presente y pregúntale a tu cuerpo qué quiere. Esto te ayudará a alejarte del ego y realizar la modificación si es necesario. Recuerda…, lo que tu cuerpo necesita un día, puede que no sea lo que necesita al día siguiente. La belleza de la práctica es que evoluciona constantemente.

Sea curioso acerca de su práctica y observe cómo el ego intenta hacerse cargo.

Pregúntate por qué quieres pasar al siguiente nivel de la pose. ¿Es porque estás listo para encontrar la fuerza y la quietud allí con la respiración que llega lenta y fácilmente? ¿O estás apegado a una “actuación” y cómo te ven los demás?

Si necesitas doblar las rodillas hacia abajo, hazlo.

Si necesitas usar un bloque, úsalo.

Cada cuerpo es diferente, así que sigue haciéndolo y recuerda: En yoga no existe la postura perfecta.